Mónica Naranjo vuelve a la música y lo hace por la puerta grande, con una ópera-rock en la que lleva trabajando varios años y con la que pretende poner fin a siete años de silencio en cuanto a material inédito se refiere.
Según palabras de la propia artista, “Lubna“ es un trabajo “colmado de amor y generosidad. Es una prolongación natural de mi estado interno y profesional“ que verá la luz este mes de enero y el que ya pudimos empezar a conocer con “Jamás”.
Mucho se ha dicho y escrito sobre Mónica Naranjo desde que en los años 90 apareciera aportando frescura, ironía y a la vez un toque de divismo al panorama musical español.
Desde entonces y hasta ahora esa chica mitad rubia y mitad morena que llegó a nuestro país desde México coronada por el éxito no ha parado de hacer de las suyas.
Curioso que a esa chica con una voz única nadie le hiciera caso en nuestro país. Muchas cadenas de radio le consideraban hortera, muchos directivos simplemente no creían en ella. Seguramente muchos de ellos a día de hoy se tiren de los pelos al saber que “la Naranjo” ha conseguido vender la friolera de más de nueve millones de discos.
Su “Desátame“, “Entender el amor” y “Pantera en libertad” se transformaron en todo un himno para sus miles de seguidores y quedaron escritos en la memoria sentimental de este país. Algunos catalogan su “Palabra de mujer” como una de las biblias del pop español de los 90.
Un éxito arrollador que llevó a la catalana a hacer en su tercer álbum eso que siempre quiso: su homenaje particular a Mina, una de las voces de su vida. Con “Minage” llegaría otro himno, “Sobreviviré“, una de esas canciones complicadas que poco a poco se van adheriendo a la piel y de las que es imposible escapar.
Según palabras de la propia artista, “Lubna“ es un trabajo “colmado de amor y generosidad. Es una prolongación natural de mi estado interno y profesional“ que verá la luz este mes de enero y el que ya pudimos empezar a conocer con “Jamás”.
Mucho se ha dicho y escrito sobre Mónica Naranjo desde que en los años 90 apareciera aportando frescura, ironía y a la vez un toque de divismo al panorama musical español.
Desde entonces y hasta ahora esa chica mitad rubia y mitad morena que llegó a nuestro país desde México coronada por el éxito no ha parado de hacer de las suyas.
Curioso que a esa chica con una voz única nadie le hiciera caso en nuestro país. Muchas cadenas de radio le consideraban hortera, muchos directivos simplemente no creían en ella. Seguramente muchos de ellos a día de hoy se tiren de los pelos al saber que “la Naranjo” ha conseguido vender la friolera de más de nueve millones de discos.
Su “Desátame“, “Entender el amor” y “Pantera en libertad” se transformaron en todo un himno para sus miles de seguidores y quedaron escritos en la memoria sentimental de este país. Algunos catalogan su “Palabra de mujer” como una de las biblias del pop español de los 90.
Un éxito arrollador que llevó a la catalana a hacer en su tercer álbum eso que siempre quiso: su homenaje particular a Mina, una de las voces de su vida. Con “Minage” llegaría otro himno, “Sobreviviré“, una de esas canciones complicadas que poco a poco se van adheriendo a la piel y de las que es imposible escapar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario